Del escritorio del pastor— 14 de enero del 2024

Hoy en día, una parte de nuestro mundo continúa empezando el nuevo año con nuestra Santísima Madre. Bajo el título de la Divina/Buena Pastora, María es venerada en partes de Venezuela, Colombia, Trinidad y Filipinas (y dondequiera que estén sus devotos). Este año, la comunidad venezolana en Springfield va a presentar su amada devoción a nuestra parroquia el Sagrado Corazón y, como tal, me gustaría compartir algunas de las increíbles historias y lecciones que nos trae

En 1736, un párroco de la ciudad de Santa Rosa, Venezuela, encargó a un escultor la creación de una imagen de la Inmaculada Concepción. Para su sorpresa, lo que recibió representaba a la Divina o Buena Pastora. El sacerdote no quiso la estatua y dijo que la enviaran a otro país, pero cuando intentaron moverla, no pudieron hacerlo ni siquiera con la fuerza de innumerables hombres. Tomaron esto como una señal de que la estatua de la Santísima Virgen quería quedarse con ellos.

Los fieles comenzaron a prestar más atención a la escultura cuando un terremoto azotó Barquisimeto en 1812 destruyendo la iglesia y los edificios circundantes, pero esta estatua permaneció completamente intacta. La devoción se fortaleció aún más en 1855 cuando Barquisimeto sufría terriblemente la pandemia mundial de cólera que diezmaba a la población local. Un sacerdote, el padre José Macario Yépez, contrajo la enfermedad mortal y se ofreció a la virgen si ella intercedía para poner fin a la pandemia. La tradición dice que la suya fue la última muerte por esta enfermedad y no ha vuelto desde entonces

Actualmente, el 14 de enero de cada año, se realiza en Barquisimeto la procesión a María, más grande del mundo con un estimado de 2 millones de personas que participan en la procesión de 7,5 km. En 2016 los peregrinos superaron los 4 millones. Aun con esto de seguimiento, esta no es la patrona de Venezuela, ese honor es para Nuestra Señora de Coromoto. Sin embargo, toda devoción a María es a la madre de todos nosotros y toda devoción es veneración, nunca un culto ni adoración, estas por derecho pertenecen solo a Dios

¿Qué tiene que enseñarnos esta María? María es siempre el reflejo de su Hijo, el Buen Pastor, que con su tierno a menudo amor se muestra curando a los enfermos, y la Divina Pastora no es diferente. María es conocida mundialmente en lugares como Guadalupe y Lourdes también por los milagros de sanación que vienen a través de su intercesión, nunca por su poder

Al comenzar este nuevo año, se nos invita nuevamente a caminar con María, tal vez en una nueva relación como una madre que nos pastorea, sus hijos en salud física y espiritual, confiándonos a su Hijo. Una de las cosas más hermosas de mi vida en una comunidad multicultural como el Sagrado Corazón, es ver a María a través de los ojos de otras personas, porque cada vez que lo hago, también veo a Jesús con más claridad.

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Con un corazón para la misión,
Padre Ray Smith