Del escritorio del pastor— 4 de mayo de 2025
Queridos Feligreses,
Queridos feligreses:
¿Todavía se acuerdan de sus aleluyas? Nuestros lirios en la iglesia han resistido, pero sus flores pronto desaparecerán. Al igual que la vida espiritual, un cristiano a veces puede sentirse espiritualmente seco o débil en su caminar con el Señor. Sin embargo, cuando la vida parece más oscura, es cuando más buscamos que Cristo sea nuestra luz. Es por eso que nuestra esperanza debe permanecer firme y nuestros aleluyas resonando bien después de que los lirios se hayan marchitado.
Hablando de Esperanza, el Papa Francisco, antes de morir, inauguró para la Iglesia el Año Jubilar de la Esperanza. En el mundo, a menudo se habla de la “esperanza” como si fuera una ilusión. Por ejemplo: “Espero conseguir un buen trabajo, pero es posible que no lo encuentre”. La esperanza cristiana no es así. La esperanza cristiana es la expectativa que tenemos del cielo. Dios prometió resucitarnos de entre los muertos a una nueva vida, y por eso esperamos resucitar a una nueva vida. Eso es lo que significa, por ejemplo, en Hebreos 11:1: “ahora bien, la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.”
Este mundo está lleno de incertidumbre, pero el mundo venidero se está preparando solo para nosotros. Jesús dijo en Juan 14:2: “En la casa de mi Padre hay muchas habitaciones. Si no fuera así, ¿les habría dicho que voy a prepararles un lugar? También ha dicho en Mateo 5:11-12: “Bienaventurados sean cuando por mi causa les insulten y les persigan, y digan toda clase de mal contra ustedes, falsamente por mi causa. Regocíjense y alégrense, porque su recompensa es grande en el cielo, porque así persiguieron a los profetas que los precedieron”. Y vemos en los Hechos de los Apóstoles cómo los sacó de la prisión con sus ángeles.
No tengan miedo de los peligros y de los problemas de esta vida, sino caminen confiando en Dios. Dejen que esta temporada de Pascua les recuerde la esperanza que tienen en Jesús. Tengan fe y esperanza en Él.
Padre Joseph