Del escritorio del pastor—29 de agosto de 2021
Querida familia del Sagrado Corazón,
Puede que para muchos haya pasado desapercibido, pero este año marca el 40 aniversario de la llegada de los Misioneros Claretianos a la iglesia del Sagrado Corazón. Nuestro álbum parroquial (1982) marca nuestro centenario y nos relata como la llegada de los claretianos marcó el cumplimiento del deseo de las familias fundadoras de que la parroquia fuera confiada a una orden (religiosa) de sacerdotes. Como parte de la familia de órdenes religiosas, así como los benedictinos en San José o los vicentinos en XXXXX, nuestra vida es distinta a la de nuestros homólogos diocesanos en organización, fraternidad y gobierno.
Un área importante de distinción es como se realizan nuestras asignaciones ministeriales. A diferencia del obispo que solamente determina donde serviremos, nuestro provincial y consejo provincial debaten sobre donde podemos usar mejor nuestros dones antes de hacer las asignaciones y buscar luego la aprobación del Ordinario local en la diócesis donde seremos asignados. Este es el proceso por el que pase cuando me asignaron acá, y también lo hizo el Padre Gaspar con su nueva asignación en nuestra comunidad de Prescott, Arizona.
Menciono esto como una introducción (o reintroducción para algunos) a la nueva asignación de nuestro Hermano Manuel “Manolo” Benavides, cmf a nuestra parroquia del Sagrado Corazón por nuestro Provincial Claretiano. El Hermano Manolo servirá en nuestra parroquia como Asociado Pastoral ayudando en las áreas de liturgia, fe, formación, y enriquecimiento familiar de nuestras comunidades de habla hispana e Inglesa. Él nos servirá a tiempo parcial mientras continua su ministerio artístico en el centro cultural de Accompañarte en Glenstone Ave.
Un dato sobre nuestro Hermano Manolo que tal vez muchos no lo sepan es que termino su Maestría en Divinidad (MDiv) en el 2006 en el Catholic Theological Union. The MDiv es un grado que se requiere a todos los sacerdotes para poder ser ordenados en los Estados Unidos, y muy rara vez lo logran hacer los hermanos religiosos. Sus logros son un recordatorio, así como todos nosotros, de que siempre hay más de lo que se parece. Estoy emocionado de saber que la presencia del Hermano Manolo marcara el comienzo de un sentido más pleno sobre nuestro carisma claretiano y rezo para que su entusiasmo y energía ayuden nuestra familia parroquia del Sagrado Corazón a crecer más. Bienvenido Hno. Manolo
Todos por Jesús y María,
Fr. Ray Smith, Administrador Parroquial